Nombre: Sanyo Kōta
Edad: 23 años (difunto)
Defunción: 31 diciembre
Estatura: 172 cm
Apariencia: Pelo negro, piel clara, ojos claros, atlético
Ocupación: Policía
Estadísticas: 33/60 = Aguante 5 Fuerza 4 Velocidad 7 Agilidad 6 Destreza 5 Inteligencia 6
Audaz
Decidido. No improtaba que su cometido fuese desagradable: si tenía que hacerlo, lo hacía.
Sus padres y su hermana menor estaban muy orgullosos de él: accedió a la Policía siendo muy joven.
Llevaba un par de años en el grupo de Minato cuando le fue asignado el caso de Bloody Yuki. Minato fue prudente de no compartir los datos con todo su grupo, sino solo con quienes se encontraban con él en ese momento, y uno de ellos fue Kōta.
No tenía cualidades sobresalientes pero su predisposición a cumplir con las tareas que se le esignaban era ejemplar, por lo que Minato estuvo conforme con la elección. También trabajó en el caso con Toru, quien lleva mucho más tiempo con Minato.
Los tres se involucraron de lleno en investigar a Bloody Yuki, pero apenas avanzaron y los asesinatos seguían ocurriendo.
Finalmente, cuando el Comisario Corsalino Brocci les dio la oportunidad de apartarse del caso, la familia de Kōta le convenció para que lo hiciese, al igual que ocurrió con Toru, por lo que Minato se quedó solo en el caso. No obstante, abandonar el caso no fue suficiente para salir ileso, pues Toru y Kōta también acabaron muriendo.